Capitulo.72

La cena termino genial.

A los padres de Alex, Zaida les pareció la chica indicada para su hijo y la idea de que se casasen tan pronto les fascinaba, tenían muchas ganas de que su hijo asentase la cabeza y formase una familia.

Al acabar aquella falsa cena, Alex se ofreció para llevar a Zaida al hotel. Ella se negó al principio pero él no estaba dispuesto a aceptar un no por respuesta.

El viaje en coche transcurrió en silencio, hasta que este se rompió por la melodía del móvil de Zaida.

Era un número privado.

Zaida: Que raro ~Pensó.

Contesto.

<INICIO LLAMADA>

Zaida: Diga

Nadie contestaba, Zaida lo único que oía era una respiración al otro lado. Pero al cabo de unos segundos quien fuese se decidió a hablar.

X: Hasta el final de mundo te buscare.

Al escuchar esas palabras proveniente de aquella voz, Zaida se quedó paralizada, era Dani.

Empezaba a sentir como todas sus lágrimas la amenazaban con salir de un momento a otro.

Sin pensarlo bajo la ventanilla y lanzo el móvil.

Alex la observaba mientras conducía.

Alex: ¿Te encuentras bien?

Zaida: Solo necesito sola y estaré bien. ~Dijo seria.

En cuanto entro en su habitación y cerró la puerta, lentamente con la espalda apoyada en ella se dejó caer hasta quedar sentada en el suelo con las piernas recogidas. Allí como una niña pequeña rompió a llorar, esa voz, la voz de su ángel había hecho que se le rompería el corazón aún más de lo que ya estaba, quería sacárselo y tirarlo a la basura para no sentir nada, tanto amor como la pena.

Estaba roto, tanto por dentro como por fuera y lo peor de todo es que no tenía a nadie para que la consolase.

Eso es lo que se merecía, es lo que le tocaba por haber huido de su único amor, del amor.

Si huyes del amor, huyes de todo y de todos, llegando al momento en el que te das cuenta de que no te queda nadie, solo tú misma y tu dolor.

Zaida: Hasta el final de mundo tendrán mi corazón por lejos que yo este de ti no habrá separación. ~Musita casi inaudible.

              *** *** ***

Paso una semana, que vaya semana para Zaida, había tenido que estar por decirlo de alguna manera casi pegada todas las horas a Alex.

Al principio no se sentía muy cómoda, pero al cabo de pasar tantas horas y días juntos a él, comenzó a conocerlo más a fondo. 

Le empezaba a parecer cada vez menos inaguantable. Era un buen chico.

               *** *** ***

Silvia ya estaba montada en el coche, llevaban una hora de viaje ya.

Se sentía tan cobarde, no se había atrevido a llamarlo.

Justo en ese mismo al igual que ella Álvaro estaría también en el coche pero a diferencia de ella el volvía a Madrid y ella se iba.

Casa minuto que pasaba y lo pensaba se sentía peor, pensaba en Álvaro yendo hacia su casa con su preciosa sonrisa con esas tremendas ganas que ambos tienen de verses. Y pensar que al tocar el telefonillo de su casa y nadie le conteste poco a poco su sonrisa ira desapareciendo.

Tenía que hacerse valiente, tenía que llamarlo aunque fuese en ese momento, en el último momento pero él tenía que saberlo.

Sino no se sentiría tranquila.

<INICIO LLAMADA>

Álvaro: Hola amor, que bien sienta saber que ya volvemos a Madrid, no sabes las ganas que tengo de verte.

Silvia: Hola cariño, yo también tengo muchas ganas de verte…

Álvaro: Suenas triste ¿Ocurre algo?

Silvia: Es que… Mis padres tenían que hacer un viaje de negocios y han insistido en que los acompañe. No estoy en Madrid.

Álvaro: Vaya… Con las ganas que tenia de darte un fuerte abrazo y un beso de estos que te quedan sin labios.

Silvia: Ains no me digas eso que me pongo aún más triste, con lo que deseaba que llegase este día para verte…

Álvaro: No te pongas triste, no pasa nada, así cuando te vea te tendré más ganas.

Silvia: My policeman… te amo.

Álvaro: Yo sí que te amo mi mimosina.

Silvia: Que tengas buena llegada.

Álvaro: Y tu buen viaje.

<FIN LLAMADA>

              *** *** ***

Zaida recibió una llamada, a su nuevo móvil que le había regalado Alex para poder hablar en cualquier momento que fuese necesario. 

Diciéndole que fuese a su casa lo antes posible.

Tenía curiosidad que era lo que ocurría por lo que no tardó mucho en presentarse en la casa.

Al entrar en la casa Zaida se percató que estaba la madre de Alex.

La saludo dándole dos besos.

Zaida: ¿Y Alex?

Madre de Alex: Esta en el despacho haciendo unas llamadas no tardara en salir.

Justo cuando termino la frase el salió del que se supone que es su despacho en la cama.

Alex: Mi cielo ya llegaste que bien ~Dándole un beso en los labios.

Zaida: ¿Qué era tan urgente cariño?

Alex: Quiero que te vengas conmigo a las a fueras de Barcelona a cerrar unos trabajos con unos muy buenos amigos de la familia.

Zaida: Pero yo no quiero molestar, mejor me quedo aquí.

Madre de Alex: Como vas a molestar mujer, además así pasáis más tiempo juntos antes de la boda, ya solos es quedan dos semanita, estarás nerviosa.

Alex rodeo la cintura de Zaida con uno de sus brazos.

Zaida sonrió falsamente.

Zaida: Si estoy deseando…

              *** *** ***

Con menos de una hora ya habían llegado a un hotel muy lujoso que había a las afueras de Barcelona.

Alejandro mando que les llevasen el equipaje a la habitación ya que ellos irían directamente al comedor donde ya les estarían esperando.

Al parecer los socios de Alex aún estaban es sus habitaciones descansando, por lo que Alex pido algo para beber mientras esperábamos.

Alex tomo de la mano de Zaida, la verdad es que ella no tenía ganas de discutir y ese gesto no le disgustaba, por lo que no le dijo nada.

Alex: Mira hay vienen.

Zaida dirigió la mirada hacia donde estaba la entrada del comedor, estaban una pareja de la edad de los padres de Alejandro que se dirigieron hacia la mesa. Y detrás de ellos una chica. 

Silvia.

Silvia al ver a Zaida allí se quedó sin habla, ella estaba enterada de todo lo que había pasado con Dani. Por lo quedo sin saber qué hacer.

Zaida igual que ella comenzó a mirar a otro lado.

Silvia: Mama se me ha quitado el hambre voy a dar una vuelta ~Dijo en un tono muy nerviosa.

Su madre asintió.

Zaida: Alex yo voy a tomar el aire y así habláis más tranquilo ~Levantándose enseguida para ir detrás de Silvia.