Pasaron dos días, Zaida no reaccionaba,
lo que ponía muy nerviosos a todos aunque el medico les dijese que había
mejorado y que estaba fuera de peligro.
Una de las mañanas muy temprano Daniela
se presentó en el hospital, le dijo a Dani que se fuese al hotel a descansar un
poco que ella se quedaría allí hasta que él volviese.
Dani acepto. Después de todo sabía que
Daniela la cuidaría bien después de todo eran como hermanas, siempre lo habían
sido, nunca habían dejado de serlo. Aun que ellas lo creyesen.
Daniela observaba a Zaida tumbada en
aquella cama inmóvil.
Le dolía tanto verla en ese estado.
Daniela: Amiga, valió la pena todo
hasta aquí, desde que nos conocimos, parece que fue ayer cuando chocamos en las
puertas de aquel bar y comenzamos a hablar, te mire a la cara y supe desde ese
instante que eras distinta a los demás, solo pasaron 3 días pero ya te quería,
eras la estrella en mi oscuridad, que iluminaba mi camino y lo sembrabas
conmigo con semillas de serenidad. Valió la pena lo que vivimos, lo que soñamos
juntas y lo que conseguimos. ~Se detuvo unos segundos para no romper a llorar~,
Sé que me escuchas, por eso quiero que sepas que ese periodo en el que las dos
hemos sido unas tontas y orgullosas ya está olvidado, que tú siempre has sido
mi mejor amiga, bueno no, mi hermana. Porque tú eres la que siempre ha estado
hay en lo malo y en lo bueno. Por eso no te puedes ir, tienes que seguir luchando,
aún nos quedan muchos momentos que vivir juntas, no puedo vivirlos sin ti,
porque ambas sabemos que no será lo mismo. Nadie podrá reemplazarte… ~Se
levanta del asiento que esta junto a la cama, se acerca a Zaida y le da un beso
en la mejilla~.
Te quiero.
Daniela se giró hacia la puerta para ir
al servicio.
Estaba ya por salir, cuando escucho un
“Yo-o también te quiero”.
No se creía lo que acaba de oír.
Se giró con la cara llena de lágrimas.
Y vio a su amiga sonriéndola desde a cama y con los ojos un poco entre
abiertos, debido a que la luz le molestaba un poco.
Daniela sintió también entre lágrimas.
Tardo poco en correr a abrazarla.
Varios minutos después de haber hablado
con su amiga y ponerla un poco al día. Daniela le comento que tenía que llamar
a Dani y a los demás. Zaida le respondió que a los demás los podía llamar pero
que a Dani no que lo dejase descansar además de que quería ver la cara que
ponía cuando la viese despierta.
*** *** ***
Dani había hecho una pequeña mochila
con todo lo necesario para tenerse que mover lo más mínimo del hospital.
Caminaba rápido por lo pasillo del
hospital. Al llegar hasta la habitación en la que se encontraba Zaida, le
pregunto a Daniela que estaba fuera junto a la puerta que si había habido
alguna novedad.
Daniela se encogió de hombros, intento no sonreír, pero no
pudo.
Dani frunció el ceño al no comprender a
Daniela.
Daniela le dijo que ya se iba, que
volvería más tarde.
Dani asintió, tras despedirse rápido de
ella. Entro en la habitación.
Se quedó paralizado al ver a una Zaida
muy despierta comiendo la comida que te ponen en las bandejas típicas de todos
los hospitales.
Dejo caer la mochila al suelo.
Dani: Por favor dime que no estoy
soñando.
Zaida sonrió.
Zaida: Si quieres comprobarlo te
pellizco. ~Bromeando.
Dani caminó hasta la cama.
Ella lo coge de la mano. Él acaricia la
de ella.
Zaida: Creo que tenemos que hablar de
muchas cosas.
Dani: Si… Pero no hay necesidad de
hablar ahora, déjame asimilar de
que estas bien. ~Mientras la besa.
*** *** ***
Unos días más en el hospital y Zaida
estaba casi como nueva.
El doctor había decidido darle el alta,
después de mucho insistir ella. Con la condición de que comiese
equilibradamente y que mantuviera reposo.
Esas eran las condiciones del doctor
para volver a su vida.
Zaida también tenía unas condiciones,
condiciones para volver, volver a poner todo en orden y poder volver a su vida
de siempre.
Condiciones para Dani.
1ª-.Antes de volver a Madrid necesitaba
tiempo para pensar, sin él.
2ª-.Se volverían a ver el día de la
boda de su madre.
3ª-. Nada de estar con otras personas
del diferente sexo muy muy sentimentales. (Condición very important)
4ª-. No olvidar ni un segundo que ella
lo amaba solamente a él.
Dani acepto las condiciones, pero él también
tenía las suyas para
ella.
1ª-. Estar comunicados los días, por
cualquier medio por el que pudiesen hablar.
2ª-. Decirle donde iba a estar, nada de
ninguna fuga.
3ª-. Que en la boda de su madre,
obligatoriamente ella fuese su pareja.
Zaida también acepto las condiciones.
A la mañana siguiente, Zaida fue de
compras con Dani y entre tienda y tienda ella le contaba que se iría con su
madre a Badajoz. Ya que allí es donde vivía su futuro marido. Y también le
informo de que la boda no sería en aquella ciudad, de eso nada, días antes del bodorrio
se trasladarían hasta Cádiz. Él lugar donde se verían.
A Dani eso de tenerla tan lejos, no le convencía.
Pero no le quedaba otra que aguantarse.
*** *** ***
Dos días después, cada uno estaba en
una ciudad, él en Madrid y ella en Badajoz.
Beatriz, la madre de Zaida, ya la
estaba esperando en la estación de trenes cuando llego.
La verdad es que necesitaba pasar
tiempo con su madre, la extrañaba mucho.
El camino hacia el chalet donde vivía su
madre, fue por decirlo de alguna manera, una saturación de datos, para su
madre, ya que Zaida le contaba todo lo que había pasado y Beatriz no se lo podía
creer.
Beatriz: A ver si he entendido bien, Danielito
te pidió que te casases con él a ti te entro el pánico y te fuiste a Barcelona donde
te casaste con un millonario al que querías pero no amabas, después Dani te encontró
y volvisteis aun tu estando casada, después tuviste un accidente, hasta ahora.
Zaida: Si esa es una versión resumida.
Beatriz: Increíble, está claro que no
te puedo dejar sola. ~Negando con la cabeza mientras aparcaba.
Zaida se dio cuenta que el chalet no
estaba a las afueras de la ciudad, lo que le venía bien para poder salir por la
ciudad sin tener que utilizar demasiado el coche.
Nada más entrar, un hombre con un par
de años más que su madre, las saludo sonriendo.
Alberto: Hola yo soy Alberto, encantado
de conocerte.
Beatriz: Él es muy futuro marido. ~Le
comento su madre.
Zaida: Encantada de conocerlo ~Dándole
dos besos.
Le indicaron cuál sería su habitación,
en la cual su madre ya se había ocupado de poner a su gusto para que estuviese
lo mas cómoda posible. Después de acomodarse y descansar un poco Zaida bajo
para cenar.
Fue hasta la cocina donde se encontró con
Alberto y su madre cocinando algo muy rico por como olía.
Zaida se sentó en uno de los taburetes
que había junto a la barra de la cocina, se puso a observarlos.
Era increíble cómo se complementaban, parecían
una sola persona y nunca faltaba un piropo, caricia o beso. Era la representación
del amor verdadero.
Zaida: Yo espero llegar un día así con
Dani. ~Rompió el silencio.
Alberto y su madre la miraron, estaban
tan concentrados en hacer una cena deliciosa que no se habían dado cuenta de
que ella había bajado.
Alberto siguió cocinando. Beatriz se giró
para hablar mejor con su hija.
Beatriz: ¿Qué quieres decir?
Zaida: No sé… Se ve que os entendéis a
la perfección.
Beatriz: ¿A la perfección? ~Rio un poco~,
Eso es por qué es lo primera vez que nos ves, pero este señorito y yo somos muy
diferentes.
Alberto: Bueno ya sabes lo que dicen ~Deja
un hacer lo que estaba haciendo para acercarse a Beatriz~, Los polos opuesto se
atraen. ~Y
le da un besito.
Zaida se quedó pensando hasta la cena.
Donde estuvieron conversando y riendo
con las anécdotas de su madre y Alberto.
*** *** ***
Dani al llegar a Madrid, lo primero que
hizo fue llamar a su madre, ya que hacia un tiempo que no hablaban.
Después descanso un poco, ceno y decidió
salir un rato con los chicos.
Eso le mantuvo la mente ocupada, pero
cuando llego el momento de dormir, no era capaz de conciliar el sueño.
Miro la hora, era muy tarde, no quería
despertar a Zaida.
La llamaría por la mañana.
Esa noche ambos se durmieron extrañándose.