Capitulo.10
Erika
se gira toda furiosa, decidida a
gritarle a aquel que se acaba de atrever a detenerla en ese momento.
Pero
toda su furia desaparece instantáneamente al ver que él que la agarra es
Álvaro.
Erika:
¿Qué haces?
Álvaro:
Evita que la armes. ~Le dice agarrándola aun.
Erika:
Solo le voy a decir unas palabritas al imbécil ese ~Responde alterada.
Álvaro:
Tranquilízate
Erika:
¿¡Tranquilizarme!? ¡¡EN TUS SUEÑOS!! ~Grita mirándolo a los ojos.
Álvaro:
En mis sueños ocurren cosas mejores… ~Sonríe.
Erika:
¿Cómo qué? ~Pregunta con intriga.
Álvaro
y Erika se miran a los ojos, y él sin hacer caso a ninguno de sus pensamientos
lentamente se acerca a sus labios y la besa.
Ese
beso dice todo y más, sobre lo que ellos no quieren admitir, por lo menos por
parte de Erika, porque Álvaro desde el primer instante que la vio en la
discoteca supo que aquella chica le robaría el corazón.
El
primer beso entre ellos acaba.
Álvaro
apoya su frente en la de Erika.
Álvaro:
Supe que eras especial desde el primer segundo que apareciste ~Susurra.
Erika
no sabe qué decir, toda su furia ha desaparecido por completo y ahora esta
confundida.
Y
responde de la única manera que sabe, escabulléndose del momento, y deja allí
solo a Álvaro.
Él
se queda ahí parado, viendo como ella se aleja, arrancado de cuajo de su mente
el pensamiento de que entre ellos dos podía nacer algo más que amistad.
*** ***
Dani
y Blas no hablaban casi nada pues estaban impacientes por saber cómo estaba
Zaida.
David
y Daniela intentaban hacerles reír aun que ellos estaban igual de preocupados
que los demás.
*** ***
Carlos
entra en el baño de chicas sin preguntar ni nada.
Ve
a Zaida allí tirada en el suelo con las rodillas recogidas y la cara tapada por
sus manos para que nadie la vea derramar ninguna lagrima.
Carlos
se pone a su lado, y se agacha para poder hablar mejor con ella.
Carlos:
Hey no llores, ninguna chica debería derramar ninguna lagrima ~Dice apartándole
las manos de la cara.
Zaida:
Vete no quiero que me veas en este estado…
Carlos:
No pienso dejarte y mucho menos como estas…
Zaida:
Debes de pensar que me lio con el primero que se me pone por delante.
Carlos:
No… Eso nunca, Blas y yo hemos visto todo lo que ha pasado desde el principio y
cuando el tipejo ese no te soltaba, sentí como la sangre me hervía por dentro.
Zaida:
Gracias si no llega a ser por vosotros yo… ~Carlos le pone el dedo índice
delante de los labios.
Carlos:
Ni se te ocurra decirlo.
Zaida:
Tú eres un poco bipolar ¿no? ~Dice mostrando en su cara una sonrisa un poco
forzada.
Carlos:
¿Por qué lo dices?
Zaida:
Porque primero me tratas bien, esta mañana me hablas como me hablaste y ahora
mira…
Carlos:
Es que últimamente ni yo me entiendo ~Mira hacia el suelo.
Zaida:
Si conozco esa sensación… De no entender nada de tu propia vida.
Carlos
levanta la cabeza y su mirada se encuentra con la mirada se encuentra con la de
Zaida, los dos se miran sin decir nada.
Zaida
sin saber por qué le pregunta.
Zaida:
¿Te puedo dar un abrazo?
Carlos:
Por supuesto ~Dice sacando una de sus mejores sonrisas.
Los
dos se levantan del suelo.
Zaida
sin ninguna vergüenza abraza a Carlos escondiendo su rostro en el hombre de él.
Carlos
acaricia el pelo de ella y respira su perfume, él no entiende por qué pero ese
olor, le encanta, para él es único.
No
puede evitar sonreír al estar así.
Carlos:
Cuando me necesites hay estaré… Siempre para ti ~Susurra.
Al
escuchar aquello a Zaida se le escapa una sonrisilla y como una especie de
electricidad le recorre todo el cuerpo.
Ella
levanta la cabeza y los dos se vuelven a miran a los ojos, están a centímetros.
Zaida:
Gracias, tú también si necesitas algún favor no dudes en pedírmelo.
Carlos
baja su mirada hacia los labios de Zaida pero solo por unos segundos, enseguida
vuelve a mirar sus ojos.
Entonces
entra Daniela.
Daniela:
¿chicos estáis bien? Es que estamos preocupados.
Zaida
y Carlos dejan de abrazarse.
Zaida:
Si ya estoy más calmada…
Daniela
abraza a Zaida.
Daniela:
Sera mejor que salgamos ya, todos están de los nervios.
Carlos:
Si vamos.
Salen
del baño, y hablan con los demás de que todo está bien.
En
el camino de vuelta a casa, en el taxi. Dani se sentó al lado de Zaida, él le
pasa un de su brazos por los hombros de ella, acercándola más a él. Zaida se
arrima a él y apoya su cabeza en su pecho, mientras los dos hablan sobre lo que
harán en los dos últimos días que ellos estarán allí.
En
ese mismo taxi también iba Erika atrás con Dani y Zaida, pero iba callada, y
delante estaba Blas.
En
el otro taxi los demás.
*** ***
Zaida
al entrar en su habitación, coge su pijama y se cambia.
Cuando
va apartar las sabanas para meterse en la cama, observa que sobre la almohada
hay una rosa amarilla junto a una nota.
Coge
la rosa y la mira, piensa en quien se habrá mandado. Coge la nota, primero
observa la letra, pero no la reconoce.
Entonces
la lee.
Siento lo de esta mañana.
Es que a veces soy un poco
imbécil, pero eso no es nada nuevo para mí. Espero que me perdones.
-Un rubio arrepentido
|
Al acabar de leerla se sonroja y no puede
evitar echarse a reír.
-No me lo puedo creer. Todo esto es para
pedirme disculpa por el comportamiento que tuvo por la mañana. ¿Sera que le
importo algo? No digas tonterías, todo esto lo ha hecho por ser educado nada
más. Si, seguro que es eso. ~Piensa Zaida.
Convencida de lo que había pensado se metió en
la cama y se durmió.