El corazón me iba a mil por hora,
sentía que necesitaba más oxigeno del que mis pulmones estaban capacitados a
obtener. Sentía una presión en el pecho y todo en la cabeza me daba vueltas, la
habitación, cada palabra de Dani de aquella carta.
Las piernas me temblaban, no podía
mantenerme en pie. No podía más, no podía con tanto sufrimiento. Me rendí, y me
deje caer sobre mis rodillas llorando. Tenía la vista nublada, por las lágrimas
y por el gran mareo que tenía. Sentía que me iba a dar algo.
Los parpados me empezaron a pesar, un
extraño sueño se estaba apoderando de mí.
Y en ese instante, mirando hacia la
puerta, me pareció ver a un Dani entrar muy preocupado al verme así y correr
hacia mí.
Maldita imaginación la mía, me estaba
llevando a la locura.
Cerré los ojos al no poder resistir más
el sueño que se apoderaba de mí, lo último que escuche fue a alguien llamándome
a gritos.
*** *** ***
Cuando desperté, me encontraba en una
habitación completamente blanca.
Me mire las manos, en una de ellas,
tenía puesto un gotero y en la otra un conector que controlaba mi pulso.
Estaba en el hospital.
Esta ya era la segunda vez en menos de
dos meses, esto de visitar los hospitales se estaba haciendo todo un habito en
mí.
La puerta de la habitación estaba entre
abierta, desde donde estaba podía ver en el pasillo un doctor, hablando con dos
personas, un hombre y una mujer, pero tal y como estaba la puerta no me
permitía ver quiénes eran.
Tras varios minutos después, el doctor
entro y con Andrea.
La mire confusa.
Andrea espero a que el doctor terminase
de revisar que todo estaba bien y a que se fuese para hablar.
Andrea estaba a punto de hablar cuando
la detuve.
Zaida: ¿Qué me ha pasado? ¿Me
encontraste tú? ¿Quién estaba contigo ahí afuera? y ¿sabes algo de Dani?
Andrea negó con la cabeza.
Andrea: Haber lo primero tienes que
estar tranquila. ~Respiro hondo~, Has tenido un fuerte ataque de ansiedad, tan
fuerte que llegaste a desmayarte. Y si te encontré en el piso de Dani, me
tenías preocupada y supuse que estarías allí.
Eleve una de mis cejas. Aun le quedaban
más preguntas que responder.
Andrea: ¿Hay afuera? ~Dijo nerviosa~,
Pues quien iba a estar, David. Y sobre Dani no hay noticia alguna.
Zaida frunce el ceño.
Andrea: El doctor ha dicho que te dará
el alta esta tarde, mientras tanto intenta descansar.
*** *** ***
Cuando por fin salió del hospital,
Andrea se empeñó en acompañarla a casa, incluso le pidió que se fuese con ella
a casa, cosa a la cual Zaida se negó.
Quería estar sola. Necesitaba estar
sola.
Cuando por fin estuvo completamente
sola en casa soltó un profundo suspiro.
No podía así, se estaba destrozando
cada segundo que pasaba un poco si seguía así.
Estaba claro que Dani no quería ser
encontrado, si esa era su decisión, ella lo respetaría. Lo había buscado y el
aun así se había escondido. Pues se acabó.
Se dirigió hacia el reproductor de
música y pulso el botón “play”. Comenzó a sonar Desátame de Mónica Naranjo.
Se fue desnudando mientras iba cantando
a grito pelado por toda la casa.
Zaida: “…Amor ya ves que me faltas tú,
y ahora, te falto yo. Desátame o átame más fuerte…”
Meneando las caderas entro en el cuarto
de baño para ducharse.
Cuando termino, miro en su armario.
Quería destacar, por lo que cogió un
vestido azul eléctrico que tenía en el fondo y que siempre le había dado vergüenza
ponerse.
Era muy temprano aun no eran ni
siquiera las 6.
Muy temprano para salir.
Se puso a pensar, salir iba a salir de seguro,
¿Pero con quién?
Cogió el fijo y comenzó a marcar el número
de Erika.
<Inicio Llamada>
Erika: ¿Zaida?
Zaida: La misma, tía cuanto tiempo eh
Erika: Demasiado, desde que te fuiste a
quien sabe dónde.
Zaida: Si es una larga historia, si
quieres esta noche podemos salir y te la cuento.
Erika: ¿Esta noche? Es que ya tengo
planes con Blas. ¿Qué te parece mañana?
Zaida: Vaya, no sé, yo te llamo si me
viene bien.
Erika: Vale, chao besos guapa.
<Fin Llamada>
Llamo a Silvia y más de lo mismo.
Zaida: Pero qué coño pasa hoy que todo
el mundo tiene planes. ~Bufo.
Pensó en llamar a Andrea, pero le apetecía
que estuviese toda la noche pendiente de ella como si fuese su madre, la quería
pero para madre ya tenía a la suya, y además que vendría David y eso le recordaría
a Dani, cosa que no le apetecida lo mas mínimo.
Se estaba quedando sin opciones.
Se puso a pensar.
¿A quién le gusta tanto la fiesta que
es imposible de negarse?
¿Lucia? No. ¿Arturo? Que va ya no vive
en Madrid. ¿Tomas? Puede.
Hizo un intento por recordar el número
y rezo para que siguiese siendo el mismo.
Tomas era un compi de tuto, siempre
andaban haciendo el tonto, solo cuando él no estaba con alguno o alguna, si, es
bisexual. Y un amor de chico por no decir que esta como un queso. Moreno, ojos
color miel y un cuerpazo de infarto que más se puede pedir.
<Inicio Llamada>
Zaida: Tomas…
Tomas: El mismo ¿Quién lo pregunta?
Zaida: Tío anda que no reconocerme por
la voz…
Tomas: Zaida anda no te andes quejando…
Zaida: Con que si sabias quien era.
Tomas: Como no voy a reconocer tu voz
si no te callabas por las mañanas.
Zaida: Ni que no me callase nunca.
Tomas: Mas o menos ~Rio~ ¿Qué raro que
tu doña perfecta me llames
Zaida: Te diré lo que quiero en dos
palabras. Acompañante Fiesta.
Tomas: ¿¡De fiesta?! Pero tú estás
loca.
Zaida: No jodas que tú tampoco quieres
salir.
Tomas: No te he dicho que no, preciosa.
Estas loca, porque tú y yo juntos somos una bomba en una party
Zaida: Vale pues te espero dentro de un
par de horas en mi casa.
Tomas: Perfecto. Conozco un sitio nuevo
que es una pasada.
Zaida: Lo vamos a pasar genial. Hasta
luego.
Sube otro ya porfa...
ResponderEliminarSube mas porfaaa
ResponderEliminarHola,
ResponderEliminarVas a seguir escribiendo?
Un beso ;)
Si voy seguir escribiendo y subiendo este verano. Hoy comienzo un maratón
Eliminar